HISTORIA DE LA
Ganadería Victorino Martín
AÑO 1928
Los Hermanos Escudero, Roque y Bernardo, sobrinos de José Bueno, trasladan su mitad de la ganadería a la finca "El Cerrillo", en Galapagar y continúan con la buena fama de la ganadería. Durante la Guerra Civil la ganadería está a punto de desaparecer "devorada" por las tropas republicanas, que la reclaman como sustento. Bernardo, a riesgo de su vida, consigue salvarla. La ganadería adquiere tal fama que el propio Marcial Lalanda compra una punta de reses. En un tentadero en la sierra, ve Victorino por primera vez, acompañado de su hermano Adolfo, el juego de las vacas cárdenas. En 1941 el Duque de Pinohermoso, propietario de reses Parladé, compra esta ganadería. Debuta en Barcelona y a uno de sus toros le dan la vuelta al ruedo. Pero el Duque cruza ambas líneas y la ganadería se estropea hasta desaparecer. La otra mitad de la ganadería de José Bueno, que se había quedado su viuda, Juliana Calvo, permanece en Extremadura. Se lidiará a su nombre hasta el momento de su muerte, en 1.941, aunque el peso de la ganadería lo lleve su sobrino Antonio. La ganadería se convierte en una de las favoritas de las figuras como Manolete y la casa Dominguín, entre otros.